POBREZA ENERGÉTICA
El concepto de «pobreza energética» hace referencia a la dificultad que tienen los hogares para satisfacer sus necesidades energéticas con energías limpias y asequibles. Es un concepto que por lo tanto, visibiliza en función de la capacidad económica las posibilidades de acceso a la red eléctrica, a fuentes energéticas y de consumo energético.
Anahí Urquiza |
Nos acercamos al concepto de pobreza energética de la mano de Anahí Urquiza, académica de la Facultad de Ciencias Sociales de la Universidad de Chile, investigadora del Centro del Clima y la Resiliencia y coordinadora de la Red de Pobreza Energética.
Señala Urquiza que en las investigaciones sobre pobreza energética toman en consideración a las poblaciones más vulnerables y analizan su acceso a la energía y cómo les afecta o puede afectar la mitigación desde varios focos de análisis.
(1) Una línea de investigación se centra en el estudio de cómo los hogares enfrentan las condiciones climáticas. Lo primero que debemos recordar es que todavía hay un gran número de hogares que no tienen conexión a la red eléctrica. Realizada esta observación analizamos a continuación las consecuencias de dos fenómenos climáticos el frío y el calor. Cuando hace frío se observa como las viviendas que no cuentan con aislación térmica necesitan mayor consumo energético, y esto implica que tienen que usar muchísima energía para lograr llegar a ciertos niveles de temperatura en el invierno. Normalmente el recurso más barato y al que tiene acceso este sector de la población es la leña. La combustión de la leña es por tanto la responsable también de grandes niveles de «material particulado», esto es esa capa grisácea que se ve en la atmósfera y que comúnmente denominamos contaminación.
Estas investigaciones también se han centrado en el estudio de otro fenómeno del cambio climático, las olas de calor o épocas de altas temperaturas durante largos meses. Esta nueva realidad afecta especialmente a personas mayores y niñas y niños pequeños por ser los sectores de la población más vulnerables. Y nuevamente no es los mismo pertenecer a una clase social que a otra. Aquí nuevamente el tipo de casa, la vegetación de la que se disponen en esa zona, por ejemplo, la cantidad de árboles que hay para dar sombra, y las zonas verdes van a ser determinantes para poder sobrellevar estas islas de calor que se generan especialmente en las ciudades. La vegetación urbana es determinante para rebajar varios grados la temperatura. Y nuevamente las casas y barrios más empobrecidos son lo que se convierten en estas islas de calor urbanas. Esto sucede porque nuevamente se trata de viviendas mal aisladas y en su entorno no hay zonas verdes, y mucho menos en su interior aires acondicionados que les permitan a las personas sobrellevar las altas temperaturas.
(2) Otro foco es la promoción de políticas públicas que dentro de la «mitigación», esto es de la búsqueda de una sociedad carbono-neutral sean protectoras con este sector de la población. Por ello, desde estos estudios son criticadas las medidas como el incremento del precio de la luz porque terminarán por generar mayor estrés a las familias más vulnerables.
(3) Otra línea de investigación dentro de los estudios de pobreza energética, es la escasez de la energía y como esta escasez puede repercutir en un incremento de los costos y cómo esto afectará a los hogares más vulnerables, por ejemplo, qué sucederá en aquellos lugares dependientes de la energía hidroeléctrica en las épocas de sequía.
Para Anahí Urquiza la pobreza energética es un concepto que nos permite observar el fenómeno del cambio climático y las consecuencias de la mitigación, las barreras para avanzar en esta mitigación y cómo esto se vincula estrechamente con otros objetivos de desarrollo sostenible sin perder de vista el impacto que las energías renovables tienen en los territorios que se instalan.
Fuente: Urquiza, Anahí (2002) “Pobreza energética y el potencial de las energías renovables”. Universidad Abierta de la Universidad de Chile.
Autora: Sheila Fernández Míguez